viernes, 15 de febrero de 2013

FUTBOL EN NIÑOS DE 8 A 10 AÑOS


COMO PREPARAR UN EQUIPO BENJAMIN

CONSIDERACIONES GENERALES:
La etapa benjamín (3º y 4º de Educación Primaria) incluye a niños y niñas de entre 8 y 10 años de
edad. Nos encontramos ante un periodo muy importante en la educación deportiva de los
escolares, puesto que para la gran mayoría de ellos será la primera vez que tomen parte en una
actividad deportiva, en lo que a entrenamientos dirigidos y competiciones reguladas se refiere.
Es por ello que, como en todas las primeras tomas de contacto a nivel benjamín, esta experiencia
influirá de manera decisiva en su posterior concepción de la actividad deportiva. Sin embargo,
desde aquí, queremos animar al monitor que desarrollará su trabajo con grupos de esta categoría,
porque con un poco de ilusión y unas orientaciones adecuadas podrá llevar a cabo una actividad
tremendamente gratificante, tanto para él como para el grupo.

PARA DISEÑAR UNA RUTINA DE ENTRENAMIENTO DE FÚTBOL BENJAMÍN HAY QUE
REALIZAR LOS SIGUIENTES PASOS:

A.- REALIZAR UNA APROXIMACIÓN GENÉRICA A LAS CARCATERÍSTICAS DE LOS NIÑOS Y NIÑAS DE 8 Y 10 AÑOS DE EDAD (ETAPA BENJAMIN):
Características psicopedagógicas:

·  Tiende a abandonar las actitudes egocéntricas. Considera seriamente al otro.
·  Gran disposición para el juego.
·  Se interesa por el conocimiento objetivo. Actitud más realista; en esta etapa
desaparecen muchos mitos de infancia.
·  Respeto hacia el adulto y ganas de aprender de él.
·  Considerable mejora de la capacidad de atención. Es capaz de mantener una actividad
concreta (que no tiene porque ser necesariamente de su agrado) durante un tiempo
considerable, sin que ello comporte necesariamente dispersión.
¿COMO PREPARAR UN EQUIPO BENJAMIN?
·  Buena capacidad para representar el cuerpo, tanto de manera estática como dinámica.
·  Sentimiento optimista de la vida.
Características fisicomotrices:
·  Periodo de equilibrio en las proporciones biométricas.
·  Considerable maduración neurológica.
·  Elevada elasticidad muscular (la máxima de su vida).
·  Capacidad para mantener esfuerzos con atisbos de autorregulación.
·  Buen nivel de coordinación general. Puede realizar la gran mayoría de gestos técnicos
que requiera un deporte con un alto nivel de aproximación.
·  Busca soluciones motrices ante los problemas que plantean los juegos.
·  Demanda casi constante de actividad.

B.- OBTENER UNA VISIÓN GENERAL QUE RELACIONA EL OBJETIVO PRINCIPAL DE CADA ETAPA CON LOS CONTENIDOS DE TRABAJO EN LOS DIFERENTES CONTEXTOS
PEDAGÓGICOS.

El objetivo de la etapa benjamín es la familiarización con:
·  a.- La dinámica de aprendizaje (contexto social): el grupo, las sesiones de trabajo y el
Entrenador.
·  b.- Los elementos básicos del juego (contexto técnico): el campo, los compañeros y el
balón.
·  c.- Los aspectos básicos del juego (contexto conceptual): las reglas, concepto global del
juego y la competición.
Cada uno de estos bloques estará integrado por diferentes fundamentos desde los que, partiendo
de una introducción, se podrá acceder a la serie de propuestas de actividades de cada uno de
ellos.

C.- PROFUNDIZAR EN LOS CONCEPTOS BÁSICOS DEL JUEGO PARA ESTA EDAD
(CONTEXTO TÉCNICO).

1.- El campo:
El campo es una variable muy importante en el desarrollo del juego, y para un niño que empieza
resulta de especial importancia un proceso de adaptación al terreno de juego y a sus referencias
más importantes con el objeto de que sepa desenvolverse, cuando menos a nivel de ubicación
espacial, de una manera razonable.
De esta forma el conocimiento de las líneas de banda, las porterías, el centro de juego y las áreas
se convierten en objeto del trabajo, a fin de conseguir que el niño se oriente adecuadamente en el
terreno de juego.
2.- Los compañeros:
Para un niño que empieza a jugar a fútbol, o a cualquier otro deporte, es importante que tenga un
proceso de acondicionamiento acorde a las características propias de la actividad. En nuestro
caso, el fútbol, será un deporte de equipo, con lo que ello comporta a nivel relacional.
De esta manera, la primera labor del entrenador - educador, acaso la más importante, consistirá en
que ese grupo de niños y niñas con los que deberá trabajar sean capaces de desarrollar
solidariamente las tareas inherentes a la práctica deportiva: entrenamientos y partidos
fundamentalmente, y hacer que funcionen como un bloque, como un equipo. Este propósito, como
bien saben los entrenadores de cualquier nivel, no es fácil de conseguir con cualquier tipo de
grupo, pero está sobradamente demostrado que los hábitos adquiridos en las primeras etapas del
aprendizaje inciden decisivamente en el comportamiento posterior.
En este sentido, nuestras propuestas pretenden, por medio de juegos motores abiertos de carácter
lúdico, propiciar la relación, el contacto y de alguna manera la unión solidaria entre el grupo de
niños de los que pretendemos hacer un equipo. Y conviene resaltar que el resultado de esta labor
pedagógica no se medirá por parámetros deportivos (clasificación, nivel de destreza...), sino por
vivenciales. Si se consigue que el niño recuerde esta etapa deportiva como una época de
sensaciones positivas, tal vez hayamos cubierto la parte más importante de nuestro objetivo y
puesto de alguna manera los cimientos de motivación imprescindibles para que continúe
practicando deporte.
3.- El balón:
Básicamente, técnicamente trabajaremos en esta edad, conducción, regate, control, pase y tiro.
Conducción:
Llamamos conducción a la acción de desplazamiento individual del/de la jugador/a con el balón
controlado.
A nivel colectivo es una de las maneras que tiene un equipo de progresar hacia la portería
contraria; siempre, o casi siempre, en combinación con el pase.
En la categoría benjamín, trataremos la enseñanza de la conducción en función de su finalidad; es
decir, progresar con el balón sin incidir demasiado en matices técnicos, tratando de que el niño
experimente por sí mismo las dos variables fundamentales que inciden en la conducción: velocidad
y control.
Según esto, presentaremos a nivel general los dos tipos básicos de conducción según la prioridad
del momento:
·  Con el interior (mayor control, menor velocidad).
·  Con el exterior (menor control, mayor velocidad).
Desde un punto de vista pedagógico, trataremos de centrar la atención del alumno sobre los
aspectos más significativos para llevar a cabo una buena conducción, como son:
·  Levantar la cabeza, controlando con la vista una buena parte del campo.
·  Conducir relajado.
·  Llevar el balón controlado; ni a golpes ni a trompicones.
·  Proteger el balón.
·  No olvidarse de pasar.
Regate:
Es la acción de sortear a un contrario manteniendo la posesión del balón.
Acaso por imitación a los estereotipos comerciales que nos muestran a jugadores de élite
realizando quiebros inverosímiles, el regate es la acción más popular entre los niños de estas
edades. Una de las consecuencias de la sobrevaloración de este fundamento es el exceso de
regate que se da en cualquier confrontación deportiva entre niños y niñas de esta categoría. En
este sentido, la labor del educador será potenciar otras formas de progresión que comporten la
utilización del pase.
En este capítulo del regate, presentaremos diferentes propuestas relacionadas con esta habilidad
con el objeto de que el alumno se vaya familiarizando con los recursos varios que se pueden
utilizar para regatear. Hay, sin embargo, unas conductas sobre las que conviene incidir para que
las bases de este fundamento se vayan asentando desde esta etapa. Tales son:
·  Salir del regate con la cabeza levantada (buscando opciones).
·  Recuperar a la mayor brevedad el control del balón (cerca del pie).
·  Cambiar de ritmo en el momento del regate (de menos a más).
·  No abusar del regate.
Control:
El control es un fundamento individual básico del fútbol que podríamos definir como la habilidad de
tomar contacto con el balón de manera que éste pueda ser jugado por el receptor de una manera
eficiente.
Como con los otros fundamentos, el tratamiento del control se realizará de una manera genérica,
tratando de que el niño tome conciencia de los aspectos globales relativos al control y vaya
descubriendo a través de propuestas variadas, formas diferentes de llevar a cabo un control. De
esta manera, propondremos ejercicios en los que intervengan los factores esenciales que
determinan un control:
·  Altura.
·  Velocidad.
·  Zona y superficie de contacto.
Para que el niño los vaya descubriendo y realice los correspondientes ajustes, dejaremos los
detalles técnicos sobre el tipo y la forma de realizar los controles para más adelante.
Pase:
El pase es el medio por el que la posesión del balón se transmite entre los jugadores atacantes. El
pase es pues un vínculo, el elemento que hace que el fútbol sea un deporte colectivo. Y para que
el juego tenga un componente colectivo, social, es necesario que los jugadores que tengan el
balón se lo pasen entre ellos; cuanto más mejor.
En esta categoría, la tendencia natural es que no se produzcan demasiados pases por posesión;
bien por la tendencia de los niños a acaparar el balón, por cuestiones de control, etc. De todas
formas, esto no es óbice para incidir constantemente en su capital importancia, ya que en la gran
mayoría de propuestas de grupo que llevemos a cabo, la acción técnica del pase estará, de una u
otra forma, presente. En esta etapa, daremos especial importancia al pase realizado con el interior,
tanto por su facilidad de ejecución como por su eficacia y precisión en distancias no muy largas.
En estas edades, y de la misma manera que haremos con otros fundamentos, el tratamiento del
pase será global, sin detenernos excesivamente en los detalles, lo que nos interesa es que el niño
se habitúe a pasar el balón hacia delante, hacia atrás, a salvar oposiciones, etc. Más adelante en
el capítulo “Atacamos” trataremos el pase desde una perspectiva expresamente pretáctica.
Como aspectos a tener en cuenta de cara a adquisición de hábitos podríamos resaltar:
·  Levantar la cabeza tras recibir el pase para buscar una continuación.
·  Fijación de pierna de apoyo.
·  Alternar: derecha, izquierda; atrás, adelante; corto, largo...
Tiro:
Seguramente el tiro no es el fundamento técnico más importante, pero es, sin duda, el que marca
la diferencia, por ser el que va más asociado al objetivo final del juego: conseguir el gol.
La enseñanza del tiro en estas edades se centrará en experimentar con las diferentes superficies
de golpeo que brinda el pie: empeine, puntera, exterior e interior. En lo relativo a la distancia de
lanzamiento, se primarán los lanzamientos cortos o de media distancia, habida cuenta de que a los
niños y niñas de estas edades les cuesta imprimir velocidad al balón.
En cuanto a la técnica de golpeo, además de experimentar con las diferentes superficies,
incidiremos en aspectos posturales y gestuales como son:
·  Fijación de la pierna de apoyo.
·  Extensión y acompañamiento de la pierna de golpeo.

D.- PROFUNDIZAR EN LOS CONCEPTOS BÁSICOS DEL JUEGO PARA ESTA EDAD
(CONCEPTO GLOBAL DEL JUEGO EN ATAQUE).

Desmarques:
Un desmarque es, como su nombre indica, eludir la marca; deshacer la acción defensiva del/de la
contrario/a con la finalidad de recibir el balón.
Nos encontramos ante una acción técnico-táctica que se pone muy poco en práctica en esta
categoría, ya que la atención, tanto de los/as atacantes como de la defensa, está centrada en los
movimientos que se producen en torno al espacio inmediato donde se encuentra el balón.
Ello no quiere decir que no se deba insistir en el desmarque como fundamento; es más creemos
que es un elemento básico para poder construir un esbozo de juego ofensivo de equipo.
Así, la creación de líneas de pase debe convertirse en objetivo prioritario de los/as jugadores/as sin
balón, para lo que proponemos una serie de actividades en las que las fintas de desmarque serán
el contenido principal. De todas formas, a fin de que el movimiento tenga una cierta efectividad, a
continuación daremos unas recomendaciones básicas en el proceso de enseñanza-aprendizaje del
desmarque.
·  No quedarse quieto/a, mantenerse activo/a.
·  Movimientos cortos y explosivos para eludir la marca. ver vídeo
·  Buscar la espalda de la defensa (salir de su área de visión). ver vídeo
·  A veces frenar puede ser más efectivo que correr (cambios de ritmo: arrancadas y
frenadas).
Progresión por medio del pase:
Una vez conseguido el objetivo primero: la posesión del balón, nuestro siguiente paso será avanzar
hacia la portería contraria.
En este sentido, entendemos que la progresión por medio del pase tiene prioridad sobre otro tipo
de progresiones. Son muchas las razones que nos conducen a esta afirmación; entre ellas
reseñaremos las 3 más importantes:
·  1.- Eliminar la tendencia a acaparar excesivamente el juego por parte de los más
hábiles y conferir al juego un carácter más social.
·  2.- Aprovechar espacios y dar mayor fluidez al juego; lo que conseguiremos dando
prioridad al avance por medio de pases.
·  3.- Velocidad.- El grupo en general y cada integrante en particular debe interiorizar que
el balón avanza más rápido por medio de pases que en los pies de un jugador, por
rápido que éste sea.
Así pues, serán estos los conceptos sobre los que girarán nuestras propuestas, sobre las que
incidiremos especialmente, sin pormenorizar en cuestiones específicas. Los matices serán
genéricos:
·  Todo poseedor del balón jugará con la cabeza levantada.
·  Si se puede dar un pase, hacerlo a la primera.
·  Pasar y moverse.
·  Todos los atacantes saben dónde está el balón.
·  Utilizar todo el campo. No "apelotonarse" en torno al balón.
·  A veces, por seguridad, es necesario pasar el balón hacia atrás.
Progresión combinada:
Tenemos el balón; nos corresponde atacar. El objetivo será llegar a la portería contraria,
empleando los medios técnicos que tenemos a nuestra disposición: pase, conducción y regate.
Obviamente no podemos programar con antelación la manera en que vamos a llevar el balón,
puesto que hay que tener en cuenta variables que no se pueden controlar: la acción defensiva y el
lugar y la circunstancia en que hayamos conseguido la posesión del balón.
De todas maneras, conviene recordar que, en la medida de lo posible, es conveniente que
intervengan de una u otra manera los fundamentos anteriormente mencionados.
Los aspectos pedagógicos referentes a este apartado y en los que incidiremos de una manera
especial serán:
·  Jugar con la cabeza levantada.
·  Tras el regate, buscar opciones de pase.
·  Aprovechar la superficie del campo (ocupar espacios).
·  Balance defensivo tras la pérdida de balón.
·  Conceptos de ataque:
En cuanto a táctica no hay mucho que hablar en categoría benjamín. Si hemos decidido mencionar
algo sobre conceptos de ataque es porque, tal vez, el hecho de tener el balón comporte una cierta
necesidad de crear, ya que, a diferencia de la defensa, se tiene la iniciativa.
Sin embargo, nos hemos remitido a tres propuestas que de alguna manera pueden expresar las
ideas elementales de ataque colectivo, vistas desde una perspectiva global. De este modo,
mencionaremos el pasar y jugar, ocupar espacios, mantener distancias, intercalarse y salir rápido a
la contra, como conceptos básicos.
Recomendamos desde aquí al entrenador que no pretenda ir más allá de estos conceptos
genéricos sin pretender diseños tácticos que no le conducirán más que a perder tiempo en
detrimento de la enseñanza de los fundamentos individuales que constituyen la base sobre la que
debe cimentarse el trabajo con niños y niñas de estas edades.

E.- PROFUNDIZAR EN LOS CONCEPTOS BÁSICOS DEL JUEGO PARA ESTA EDAD
(CONCEPTO GLOBAL DEL JUEGO EN DEFENSA).

Posición básica:
En defensa, tener una buena posición de referencia resulta primordial de cara a afrontar todas las
posibles formas de intervención defensiva; es lo que llamamos posición básica. Es una posición en
la que las piernas deben estar ligeramente separadas, el centro de gravedad ligeramente bajo y el
cuerpo relajado. A partir de esta posición se estructurarán tanto los desplazamientos defensivos
como las salidas para realizar cortes, entradas, coberturas, etc.
Mención aparte merecen los desplazamientos defensivos que serán movimientos cortos en los que
se partirá de la posición básica y se retomará a partir del movimiento inmediato.
Los detalles básicos de estos movimientos son:
·  Pasos cortos cambiando el peso rápidamente de una pierna a la otra.
·  Las piernas no se cruzan; se intenta mantener la misma amplitud en todos los
movimientos.
·  Desplazamientos hacia atrás sobre las puntas de los pies.
En estas edades es conveniente que los niños interioricen esta posición para sentar las bases
posturales de la defensa.
1x1:
A la hora de defender, las referencias básicas serán el balón y el jugador. De ahí que desde el
principio convenga incidir en el trabajo defensivo individual sobre el jugador que porta el balón,
porque sin una buena técnica individual en este apartado es imposible construir una defensa de
equipo mínimamente eficaz.
A continuación presentamos cinco propuestas que persiguen esta mejora. A través de ellas
pretendemos incidir en los aspectos básicos del 1x1 defensivo:
·  Cerrar caminos al portador del balón.
·  Defender equilibrado (no cruzar los pies).
·  Recuperar tras un desequilibrio.
·  Valoración de riesgos en función de la situación (cuando entrar y cuando no).
Conceptos de defensa:
Al igual que para el ataque, en defensa se necesitan unos criterios colectivos que permitan
responder con una cierta eficacia a las diferentes problemáticas que el juego pueda generar.
Mantener una estructura defensiva que contemple un cierto orden no es tarea fácil en estas
edades, ya que, al igual que para atacar, la ansiedad por recuperar el balón genera constantes
desajustes.
No trataremos tampoco en defensa de exceder lo que el sentido común dicta en lo que a
conceptos globales se refiere. Así pues, las propuestas se encaminarán a reforzar aspectos
genéricos como son:
·  Recuperar tras perder la posesión.
·  La mayoría de los jugadores defenderán tras la línea de balón.
·  Tratar de que los atacantes jueguen en el mínimo espacio posible.
·  Proteger al portero.
El portero:
El portero es un jugador diferente del resto. ¿Por qué?
·  1.- Por su misión: detener el balón en última instancia.
·  2.- Por las características específicas de su cometido: puede coger el balón con la
mano, no se le puede cargar en el área pequeña.
·  3.- Por su ubicación: cerca de la portería.
Es obvio que el puesto de portero es muy importante. Sin embargo, en estas edades, sucede con
frecuencia una problemática en torno a este puesto: podemos tener muchos jugadores
interesados en enfundarse los guantes o por el contrario, que sea una demarcación sin candidatos,
con lo que se tiende a adjudicar el puesto al jugador de campo menos dotado técnicamente. En
ambos casos, será la mano izquierda del entrenador la que determine la manera en que se cubran
las necesidades del puesto con 2 ó 3 jugadores.
De todas formas, así como resulta recomendable que los porteros realicen actividades fuera de la
portería, es aconsejable que el resto de los jugadores de campo pase alguna vez bajo palos.
Nuestras propuestas para los porteros de esta categoría perseguirán 3 objetivos pedagógicos:
·  Orientación en su ámbito de demarcación: área y bajo palos, fundamentalmente.
·  Recepción controlada de los lanzamientos a puerta.
·  Comunicación con el resto de jugadores.

F.- CONOCER LA DIDACTICA DEL FÚTBOL EN LA CATEGORÍA BENJAMIN:

Con los conocimientos adquiridos podremos acceder a un cuadro de lo que es la didáctica del
fútbol en la categoría benjamín.
CASO 1:
·  1.- Expresión del juego: Escaso dominio de las habilidades técnicas.
·  2. -Causas: Poco tiempo de práctica o baja eficiencia motora.
·  3.- Acción pedagógica: Selección de fundamentos técnicos y Planificación de la
actividad acorde con las características del grupo.
·  4.- Acciones en el entrenamiento: Mayor aprovechamiento del tiempo, trabajando estas
habilidades desde el calentamiento. Elección de los contenidos susceptibles de mejora
teniendo en cuenta la capacidad de los jugadores. Aumento de las horas de práctica
fuera de las sesiones de entrenamiento por cuenta de los jugadores (patio colegio,
juego con los amigos, …)
CASO 2:
·  1.- Expresión del juego: Tendencia a la acumulación de efectivos en torno al área
donde se encuentra el balón.
·  2. -Causas: Ansiedad o falta de referencias.
·  3.- Acción pedagógica: Ubicación repartida en el terreno de juego y distribución racional
de espacios.
·  4.- Acciones en el entrenamiento: Es una característica del juego a estas edades.
Todos quieren ser partícipes. Tareas reducidas en número de efectivos, en superioridad
para el poseedor.
CASO 3:
·  1.- Expresión del juego: Mala repartición de la posesión del balón (pocos acaparan la
mayor parte del juego).
·  2. -Causas: Actitudes egocéntricas o inhibición por parte de los compañeros.
·  3.- Acción pedagógica: Fomento de actitudes solidarias y valoración del juego en
conjunto.
·  4.- Acciones en el entrenamiento: Es una característica de la edad. El jugador necesita
demostrar que es capaz. El jugador necesita sentirse competente. Establecer grupos de
nivel. Se verán favorecidos todos los jugadores. Reforzar las conductas solidarias.
CASO 4:
·  1.- Expresión del juego: Ínfimo número de pases por posesión.
·  2. -Causas: Carencias técnicas u absorción del juego por parte de pocos elementos.
·  3.- Acción pedagógica: Valorar la acción del pase y jugar con la cabeza alta.
·  4.- Acciones en el entrenamiento: Asumir que es una característica de la edad.
Situaciones jugadas que necesariamente obligan al jugador a descentrar la mirada del
balón. Situaciones facilitadas de entrenamiento. Trabajar en superioridad numérica para
este tipo de tareas.
CASO 5:
·  1.- Expresión del juego: Tendencia a minimizar o incluso ignorar el trabajo defensivo.
·  2. -Causas: Déficit de atención o sacralización del gol.
·  3.- Acción pedagógica: Concienciar de la importancia de la defensa y premiar acciones
como la recuperación, el trabajo de cierre, etc.
·  4.- Acciones en el entrenamiento: Considerar el juego como un continuo paso de
defensa a ataque y no tratar estas fases como algo independiente. Toda acción
ofensiva precede a la siguiente acción sin balón. Reforzar las acciones defensivas. Se
tiende a corregir las acciones ofensivas (“tienes que superarle en el 1X1” en vez de
reforzar la buena acción defensiva “muy bien defendido, así es difícil que te superen”).
CASO 6:
·  1.- Expresión del juego: Inhibición del juego por parte de determinados elementos.
·  2. -Causas: Inseguridades o miedos al ridículo, al balón..etc.
·  3.- Acción pedagógica: Énfasis en el carácter social del juego, utilización de balones
blandos e incentivar el pase en corto (evitar el patadón).
·  4.- Acciones en el entrenamiento: El jugador necesita sentirse competente. De esta
forma aumentará su autoconfianza, “atreviéndose” a “hacer cosas”. Establecer grupos
de nivel. Se verán favorecidos todos los jugadores. Refuerzos positivos de los jugadores
a sus propios compañeros.
CASO 7:
·  1.- Expresión del juego: Angustia ante la competición.
·  2. -Causas: Ansiedad, inseguridad o factores externos (presión del entorno,...).
·  3.- Acción pedagógica: Desdramatizar la competición, quitar importancia al resultado y
valorar otros factores (relaciones, vivencias,...).
·  4.- Acciones en el entrenamiento: Valorar la actuación de los jugadores en función de
sus posibilidades. Valorar el rendimiento, no el resultado. Esta valoración tienen que
hacerla también las madres y los padres. El establecimiento de grupos de nivel puede
ser muy interesante (grupos rendimiento, grupos formación).

G.- EDUCACIÓN EN VALORES:

Pero no todo es fútbol, y más en estas edades, pensamos que hay normas, actitudes y valores
inherentes a la práctica deportiva a los que hay que prestar especial atención.

VALOR 1:
·  1.- Valor: CORTESÍA
·  2.- Normas: Dirigirse de una manera correcta a compañeros, entrenador...
·  3.- Conductas a fomentar: Saludar a sus compañeros, adversarios, árbitro...
·  4.- Conductas a evitar: Expresiones ofensivas o malsonantes y actitudes irrespetuosas.
·  5.- Acciones en el entrenamiento: Refuerzo de estas conductas en el entrenamiento.
Se puede establecer un sistema de puntos positivos y negativos que los jugadores
pueden canjear por minutos de juego, elección de tareas de entrenamiento,… El
Entrenador y las madres y padres son un referente claro para los jugadores, así como
el comportamiento de los jugadores que ven en otros partidos y por la televisión.

VALOR 2:
·  1.- Valor: COMPAÑERISMO.
·  2.- Normas: Mantener una actitud positiva, de modo que el grupo se convierta en un
equipo.
·  3.- Conductas a fomentar: Apoyar a los compañeros: ánimos, aplausos...y reforzar a los
más débiles.
·  4.- Conductas a evitar: Comentarios negativos y relaciones cerradas.
·  5.- Acciones en el entrenamiento: Diseño de tareas cooperativas, de sumación de
esfuerzos. Conocimiento por parte de todos, de las posibilidades de cada jugador así
como de los objetivos individuales y de grupo. Utilizar el sistema de puntos. Jugadores
con más prestaciones pueden ayudar a los menos competentes (se van a sentir parte
de la consecución de objetivos).

VALOR 3:
·  1.- Valor: AFÁN DE SUPERACIÓN.
·  2.- Normas: Voluntad y exigencia de mejora, tanto a nivel individual como colectivo.
·  3.- Conductas a fomentar: Atención mantenida y esfuerzo.
·  4.- Conductas a evitar: Desidia y conformismo.
·  5.- Acciones en el entrenamiento: Establecimiento de objetivos individuales y grupales
(deben ser evaluables). La consecución de los mismos aumentará el nivel de
autoconfianza individual y de grupo. Utilizar el sistema de puntos. Lectura de
textos/entrevistas /reportajes sobre jugadores en los que se refuerce la idea de
superación.

VALOR 4:
·  1.- Valor: PUNTUALIDAD.
·  2.- Normas: En todas las actividades relacionadas con el equipo: entrenamientos,
partidos, desplazamientos, etc.
·  3.- Conductas a fomentar: Llegar con cierta antelación y avisar al responsable si se
presenta alguna contingencia.
·  4.- Conductas a evitar: Excusas constantes y falta de previsión.
·  5.- Acciones en el entrenamiento: Establecimiento de sus propias normas, y aceptación
de las mismas. Ser consciente de lo que supone el llegar tarde o faltar a una sesión de
entrenamiento, competición.

VALOR 5:
·  1.- Valor: ACEPTACIÓN DEL RESULTADO.
·  2.- Normas: Tras cada actividad competitiva: partidos, competiciones en
entrenamientos, etc.
·  3.- Conductas a fomentar: Actuar tras el partido según las pautas de comportamiento
asumidas, independientemente del resultado y felicitar al adversario.
·  4.- Conductas a evitar: Buscar justificaciones ajenas: árbitro, el ambiente, el campo… y
actitudes inadecuadas.
·  5.- Acciones en el entrenamiento: Asegurar “experiencias de éxito/fracaso” controladas.
Debemos saber por qué no hemos conseguido el rendimiento esperado, o por el
contrario por qué sí. Para ello cada jugador debe conocer sus posibilidades y asimismo
las del grupo. Deben ser capaces dentro de su posibilidad de objetivar su rendimiento y
el del equipo contrario. Es el primer paso para la aceptación. No sirve lo de “que mala
suerte,…además el árbitro…”. Mejor estaría “No hemos dado líneas de pase al
compañero con balón y nos lo quitaban rápido y cerca de nuestra portería” ,“Ellos han
estado muy juntos cuando no tenían el balón y luego cuando lo recuperaban daban
muchos pases por que se daban muchos apoyos, …”.

H.- SUGERENCIAS METODOLÓGICAS:

Creemos que con la información proporcionada junto con las sugerencias metodológicas el
entrenador – educador, estará en condiciones de realizar un trabajo aceptable con cualquier grupo
de niñas y niños de edad benjamín.
Sugerencias metodológicas:
·  1· Elaborar una planificación del trabajo, teniendo en cuenta como variable más
importante la adecuación de los contenidos a la edad, al tiempo disponible y a las
características del grupo.
·  2· Preparar el trabajo semanal y diario en función de lo enunciado en el punto anterior.
·  3· Llegar con cierta antelación a todas las actividades del equipo: entrenamientos,
partidos...
·  4· Anotar las incidencias reseñables de cada sesión: cambios, ausencias, retrasos, etc.
·  5· Acudir a las sesiones preparatorias con atuendo deportivo, tal y como se exigirá a los
niños y niñas.
·  6· Seleccionar una batería básica de actividades como herramienta de trabajo, sobre la
que se irán introduciendo variantes o añadiendo otras nuevas. No cambiar
constantemente de propuestas.
·  7· Escoger actividades que impliquen movimiento. Evitar las filas de espera. Intentar, en
la medida de lo posible, que el/la niño/a esté constantemente activo/a.
·  8· Evitar las explicaciones largas. Intentar corregir sobre la marcha.
·  9· Finalizar las sesiones con propuestas jugadas, cercanas al juego real.
·  10· Tener siempre presente que el trabajo se lleva a cabo con niños y niñas de 8 a 10
años, con todo lo que ello comporta a nivel de estrategias pedagógicas, que deberán
combinar dosis de flexibilidad, exigencia y capacidad de motivación.

I.- DESARROLLO FÍSICO EN BENJAMINES:

Hay que tener en cuenta que en un entrenamiento benjamín de fútbol, al igual que en otros
deportes, no se puede tener una exigencia física, puesto que los niños en edad benjamín no tienen
un desarrollo físico todavía definido.
NOTA: Texto extraído de la Web Kirolgela (diseño de entrenamientos de fútbol) del Servicio de
Deportes de la Diputación Foral de Gipuzkoa.
( Este articulo a sido reeditado del blog de nuestro amigo Guillem Benarroch “Entrenadores de
fútbol” http://entrenadordefutbol.blogia.com/ )